viernes, 20 de mayo de 2011

Inocencia vs Inteligencia

El exceso de una, no significa la ausencia de la otra.

El empeño por no parecer tonto se ha llevado al extremo.
Tanto, que hay superávit de listillos y culturetas.

Perdemos bonitos y pequeños detalles por demostrar inteligencia.
Nos olvidamos de la naturalidad de cuando una mirada se escapa, una evasión momentánea o una conversación sin transcendencia.
Aparentamos falsedad, altanería, pretenciosidad y soberbia.
Incluso a ésto se adaptan estilismos interpretados como "tendencias"

No te puedes dejar llevar, un ojo aparentemente más maduro que tú
Aprovechará cualquier sonrojo para sobresaltar.

-No señor, la ilusión no me hace tonta!
Y me gustaría ver lo triste que es su vida cuando está sólo.

Escribo desde la experiencia de no hacer las cosas demasiado bien
(o todo lo bien que los demás esperan)

Pero exijo, tanto como doy, una oportunidad a la
sensibilidad e ilusión inocente en un 100 de CI