No, no mires atrás Si miramos atrás en los andenes, La imagen permanece como una promesa.

Pero es inevitable no hacerlo.

El pasado condiciona ser lo que somos hoy,

Y a estar en este andén.

Los caminos no suelen ser fáciles, pero todo llega.

Quizá no esté viviendo al cien por cien por el acomodamiento

de éstos últimos meses al interiorismo, pero me llena por dentro.

Y me gusta quién empiezo a ser en ésta etapa.

Muchas imágenes permanecen en la memoria

mire o no atrás, me han cambiado, formado y modelado

Si, como un pedazo de arcilla trabajado, pero aún sin ser un bonito jarrón.

Para ello necesito aún muchos andenes e imágenes

porque el miedo a mirar atrás, me hace más fuerte

y sobretodo que llegues, con calma, mucha calma

para que me decores y me coloques a tu gusto dónde tu quieras